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Ruta que decidimos sobre la marcha, nada más asomarnos a la ventana y ver que la lluvia, que estuvo cayendo hasta altas horas de la madrugada, había cesado.
Así que una vez más que ponemos mente y rumbo hacia Güéjar Sierra. Localidad situada a unos 1.088 metros de altitud sobre el nivel del mar, que tiene el privilegio de ser una entra las más serranas granadinas por gracia y obra de la naturaleza, y nunca mejor dicho, para atacar rutas de baja y alta montaña.
Atravesamos el pueblo siguiendo varias indicaciones: la primera la de “Maitena-Charcón”, para continuar, a unos doscientos metros aproximadamente, por la que baja, a la derecha, hacia la Central Eléctrica del “El Castañar” y al embarcadero. Descendemos por una empinada y estrecha carretera asfaltada hasta llegar al río Genil, punto en donde dejamos aparcado el coche.
Atravesamos el pueblo siguiendo varias indicaciones: la primera la de “Maitena-Charcón”, para continuar, a unos doscientos metros aproximadamente, por la que baja, a la derecha, hacia la Central Eléctrica del “El Castañar” y al embarcadero. Descendemos por una empinada y estrecha carretera asfaltada hasta llegar al río Genil, punto en donde dejamos aparcado el coche.
Son las 12:20 horas cuando cruzamos el puente y comenzamos el ascenso subiendo por una carretera asfaltada, de momento. Pronto termina, una vez andados los doscientos primeros metros, y nos incorporamos al carril que parte a nuestra derecha y que está debidamente señalizado (el de la izquierda, nos llevaría primero a Haza Llanas – por donde a la vuelta regresaríamos – y de aquí a la Carretera de Sierra Nevada).
Continuamos por el carril que tomamos a nuestra derecha, observando que al principio comienza en bajada, pero que pronto asciende hacia el Cortijo de los Julianes. En este tramo hemos ido dejando varias salidas a un lado y otro del camino.
Aquí es donde se inicia propiamente la vereda hacia el Castillejo que nos conduce, por una respetable pendiente, hasta colocarnos “verticalmente” en el Barranco del Castillejo; destacando a la derecha, como punto de referencia, una gran roca con un agujero a modo de ventana y abierta por la naturaleza.
Por el barranco bajan multitudes de pequeños regueros de agua y la vereda discurre por su margen derecha. La vegetación está formada principalmente por pinos, castaños, nogales, higueras y algunos cerezos.
Una valla, de fabricación casera, nos sale al encuentro cerrándonos el paso; una vieja colchoneta marca “acme” que tenemos que abrir como si fuera una puerta para volver a ponerla de nuevo en su sitio y continuar con la vereda (se supone que es para impedir el paso del ganado y no de los senderistas; en fin, pero cualquiera sabe…)
Sobre el barranco del Castillejo hemos dejado atrás, un poco antes de llegar a la cerca, un viejo acueducto que abastecía la antigua Central Eléctrica de “El Castillo”.
Conforme caminamos nos vamos aproximando al arroyo que baja por el barranco hasta que nos encontramos con un sitio fácil y señalizado por donde cruzarlo. En este punto se encuentra un pequeño nacimiento-manantial de agua, el conocido como Fuente del Tío Perrancano, bajo la ladera del pinar y sobre la margen derecha del arroyo del Castillejo.Fuente que cuenta con una pequeña teja como caño al abrigo de unas rocas.
Cruzamos al otro lado del arroyo, y continuamos en ascenso para dirigirnos hacia el Cerro del Castillo, al que debemos de atacar por su lateral derecho conforme miramos hacia Güéjar Sierra y al imponente Calar, que tenemos justo enfrente y como paisaje. Llegamos a un verde collado donde observamos una antigua era de piedra y un cruce de veredas: la de la izquierda, que es la que tomaríamos muy pronto al regreso sobre nuestros pasos, nos lleva al Purche; y la de la derecha nos eleva en un último impulso hasta los restos del Castillejo y al Mirador en donde se encuentra enclavada una vieja cruz de madera.
Deducimos desde aquí, que este lugar, en su tiempo, tuvo que estar muy bien fortificado mediante recias murallas de piedra, de las que aún quedan algunos restos, y que fueron construidas por los árabes para salvaguardar el Castillete como también se le conoce; ruinas sobre las que aún quedan también restos de los muros del castillo, ahora en pie de guerra contra el viento.
Desde este mirador las vistas son espectaculares: de izquierda a derecha, la Loma de los Jarales, el Collado de las Trincheras y el Calar; al fondo Sierra Arana; abajo Canales y Güéjar Sierra; muy próximo y a nuestra izquierda observamos el espolón del Cerro del Castillo (1.253 m.) y a nuestras espaldas el Cerro del Chaparral (1.558 m.) en cuya divisoria queda anclado el famoso, emblemático y español Toro de Osborne.
Tras el avituallamiento en este hermoso mirador de la naturaleza, nos volvemos por nuestros pasos hasta el cruce en donde partían las dos veredas: tomamos la que tenemos enfrente y que lleva hasta El Purche. Vemos ahora que a nuestra derecha parte otra que nos bajaría hasta el Pantano de Canales.
El sendero que ahora tomamos nos sube hasta la Carretera de Sierra Nevada y pronto se adentra en un frondoso pinar. Asciende zigzagueante en un fuerte desnivel hasta desembocar en una carril que te incorpora a la Carretera de la Sierra. Mientras vamos ganando altura y sumando vistas, nos salen al paso restos de varios desprendimientos de rocas y a nuestra izquierda la entrada a una pequeña cueva, en la que nos adentramos con muchísimo cuidado, para encontrarnos con una sima y tres túneles horadados en su interior.
Al llegar al carril en donde ya vemos los vehículos que circulan por la carretera, al poco y a nuestra izquierda, nos sale al paso el conocido e indultado Toro de Osborne con su majestuosa y localizable, desde muchísimos puntos de estos parajes, enorme silueta negra.
Le damos un capotazo y continuamos con nuestro ascenso, ahora a nuestro pesar por el asfalto de la carretera que sube hacia la estación de esquí de Sierra Nevada. Nos salen también al encuentro, y a nuestra derecha, el Restaurante Las Víboras, en donde entramos para tomarnos un café; a nuestra izquierda el archirrenombrado Hotel el Nogal; de nuevo a nuestra derecha, tras una curva pronunciada, la conocida popularmente como Casita de los Enanitos; un puesto ambulante de venta de miel, a nuestra izquierda, en donde compramos unos tarros y jalea real; seguidamente una gasolinera y varios restaurantes a un lado y otro de la carretera hasta que llegamos al Centro de Visitantes del Dornajo. Aquí entramos para curiosear unos instantes. No nos quedamos para ver la proyección de video que muestran a todos los visitantes porque dura aproximadamente unos veinticinco minutos, y ya andábamos muy mal de tiempo, y porque además, seguramente, nos hubiésemos quedado fritos y pegados a la butaca tras el enfriamiento; pero al que hay que visitar sin dudarlo porque merece la pena aprender cosas de nuestro entorno más inmediato, que es el de la naturaleza.
Seguimos un poco más subiendo y a nuestra izquierda vemos ya la señalización que nos manda, por fin en descenso y por otra estrecha carretera asfaltada, hasta nuestro punto de inicio; la localidad de Güéjar Sierra. Descendemos y tras un barullo de curvas y varias construcciones de Casas Rurales, encontramos el carril de tierra que desciende hasta Haza Llanas o Haza Llana (un hermoso cortijo y paraje todo en llano, como su nombre indica, y sembrado literalmente de frutales, en su mayoría de cerezos) La estrecha carretera continúa hacia abajo, curva tras curva, y en un fuerte descenso, hasta el Hotel del Duque para terminar descansando en el Charcón junto a la margen izquierda del río Genil.
Pasamos Haza Llanas y un poco más abajo y a nuestra derecha vemos otro indicador de referencia. Es la entrada al Cortijo Hoyo Puente; y de nuevo, a la vista, más casas rurales.
Ya todo es seguir el ancho y largo carril serpenteante que nos deja justo en el punto de inicio de la caminata, la Central Eléctrica El Castañar, punto en donde dejamos aparcado el coche. Eran las 19:00 horas exactamente.
Decir tiene que el tiempo empleado hoy nos ha acompañado generosamente. El sol estaba como disuelto, el viento era fresco pero tirando a agradable e ideal para una larga caminata.
Como apunte de campo, pensamos que esta ruta, en otra atacada, la podríamos acometer y para no utilizar vehículo propio, y además no tener que volver al punto de inicio a recogerlo, utilizando el trasporte público de Granada a Güéjar Sierra tomando la línea regular de autobuses de la empresa Liñán; subir al Castillejo y al llegar a la Carretera de la Sierra, dirigirnos hacia el Purche, para descender por el Camino de los Neveros y terminar, bien bajando por la Fuente de la Bicha a la localidad de Cenes de la Vega y de aquí en autobús a Granada, o bien continuando por el Camino de los Neveros pasando por las Conejeras para terminar en la Bola de Oro, ya dentro del casco urbano de la ciudad.
Es una sugerencia más de tantas posibilidades con las que podemos contar mientras caminamos y hacemos que el andar sea algo realizable y demostrable. De momento, y como recuerdo de esta marcha, aquí dejo con algunas cuantas fotos, como detalle y muestra de nuestros paso, amparándome en la memoria de mi digital. ¡Un saludo y hasta la próxima!
CIRCULAR POR EL CASTILLEJO DE GÜÉJAR SIERRA Y HAZA LLANAS
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Continuamos por el carril que tomamos a nuestra derecha, observando que al principio comienza en bajada, pero que pronto asciende hacia el Cortijo de los Julianes. En este tramo hemos ido dejando varias salidas a un lado y otro del camino.
Aquí es donde se inicia propiamente la vereda hacia el Castillejo que nos conduce, por una respetable pendiente, hasta colocarnos “verticalmente” en el Barranco del Castillejo; destacando a la derecha, como punto de referencia, una gran roca con un agujero a modo de ventana y abierta por la naturaleza.
Por el barranco bajan multitudes de pequeños regueros de agua y la vereda discurre por su margen derecha. La vegetación está formada principalmente por pinos, castaños, nogales, higueras y algunos cerezos.
Una valla, de fabricación casera, nos sale al encuentro cerrándonos el paso; una vieja colchoneta marca “acme” que tenemos que abrir como si fuera una puerta para volver a ponerla de nuevo en su sitio y continuar con la vereda (se supone que es para impedir el paso del ganado y no de los senderistas; en fin, pero cualquiera sabe…)
Sobre el barranco del Castillejo hemos dejado atrás, un poco antes de llegar a la cerca, un viejo acueducto que abastecía la antigua Central Eléctrica de “El Castillo”.
Conforme caminamos nos vamos aproximando al arroyo que baja por el barranco hasta que nos encontramos con un sitio fácil y señalizado por donde cruzarlo. En este punto se encuentra un pequeño nacimiento-manantial de agua, el conocido como Fuente del Tío Perrancano, bajo la ladera del pinar y sobre la margen derecha del arroyo del Castillejo.Fuente que cuenta con una pequeña teja como caño al abrigo de unas rocas.
Cruzamos al otro lado del arroyo, y continuamos en ascenso para dirigirnos hacia el Cerro del Castillo, al que debemos de atacar por su lateral derecho conforme miramos hacia Güéjar Sierra y al imponente Calar, que tenemos justo enfrente y como paisaje. Llegamos a un verde collado donde observamos una antigua era de piedra y un cruce de veredas: la de la izquierda, que es la que tomaríamos muy pronto al regreso sobre nuestros pasos, nos lleva al Purche; y la de la derecha nos eleva en un último impulso hasta los restos del Castillejo y al Mirador en donde se encuentra enclavada una vieja cruz de madera.
Deducimos desde aquí, que este lugar, en su tiempo, tuvo que estar muy bien fortificado mediante recias murallas de piedra, de las que aún quedan algunos restos, y que fueron construidas por los árabes para salvaguardar el Castillete como también se le conoce; ruinas sobre las que aún quedan también restos de los muros del castillo, ahora en pie de guerra contra el viento.
Desde este mirador las vistas son espectaculares: de izquierda a derecha, la Loma de los Jarales, el Collado de las Trincheras y el Calar; al fondo Sierra Arana; abajo Canales y Güéjar Sierra; muy próximo y a nuestra izquierda observamos el espolón del Cerro del Castillo (1.253 m.) y a nuestras espaldas el Cerro del Chaparral (1.558 m.) en cuya divisoria queda anclado el famoso, emblemático y español Toro de Osborne.
Tras el avituallamiento en este hermoso mirador de la naturaleza, nos volvemos por nuestros pasos hasta el cruce en donde partían las dos veredas: tomamos la que tenemos enfrente y que lleva hasta El Purche. Vemos ahora que a nuestra derecha parte otra que nos bajaría hasta el Pantano de Canales.
El sendero que ahora tomamos nos sube hasta la Carretera de Sierra Nevada y pronto se adentra en un frondoso pinar. Asciende zigzagueante en un fuerte desnivel hasta desembocar en una carril que te incorpora a la Carretera de la Sierra. Mientras vamos ganando altura y sumando vistas, nos salen al paso restos de varios desprendimientos de rocas y a nuestra izquierda la entrada a una pequeña cueva, en la que nos adentramos con muchísimo cuidado, para encontrarnos con una sima y tres túneles horadados en su interior.
Al llegar al carril en donde ya vemos los vehículos que circulan por la carretera, al poco y a nuestra izquierda, nos sale al paso el conocido e indultado Toro de Osborne con su majestuosa y localizable, desde muchísimos puntos de estos parajes, enorme silueta negra.
Le damos un capotazo y continuamos con nuestro ascenso, ahora a nuestro pesar por el asfalto de la carretera que sube hacia la estación de esquí de Sierra Nevada. Nos salen también al encuentro, y a nuestra derecha, el Restaurante Las Víboras, en donde entramos para tomarnos un café; a nuestra izquierda el archirrenombrado Hotel el Nogal; de nuevo a nuestra derecha, tras una curva pronunciada, la conocida popularmente como Casita de los Enanitos; un puesto ambulante de venta de miel, a nuestra izquierda, en donde compramos unos tarros y jalea real; seguidamente una gasolinera y varios restaurantes a un lado y otro de la carretera hasta que llegamos al Centro de Visitantes del Dornajo. Aquí entramos para curiosear unos instantes. No nos quedamos para ver la proyección de video que muestran a todos los visitantes porque dura aproximadamente unos veinticinco minutos, y ya andábamos muy mal de tiempo, y porque además, seguramente, nos hubiésemos quedado fritos y pegados a la butaca tras el enfriamiento; pero al que hay que visitar sin dudarlo porque merece la pena aprender cosas de nuestro entorno más inmediato, que es el de la naturaleza.
Seguimos un poco más subiendo y a nuestra izquierda vemos ya la señalización que nos manda, por fin en descenso y por otra estrecha carretera asfaltada, hasta nuestro punto de inicio; la localidad de Güéjar Sierra. Descendemos y tras un barullo de curvas y varias construcciones de Casas Rurales, encontramos el carril de tierra que desciende hasta Haza Llanas o Haza Llana (un hermoso cortijo y paraje todo en llano, como su nombre indica, y sembrado literalmente de frutales, en su mayoría de cerezos) La estrecha carretera continúa hacia abajo, curva tras curva, y en un fuerte descenso, hasta el Hotel del Duque para terminar descansando en el Charcón junto a la margen izquierda del río Genil.
Pasamos Haza Llanas y un poco más abajo y a nuestra derecha vemos otro indicador de referencia. Es la entrada al Cortijo Hoyo Puente; y de nuevo, a la vista, más casas rurales.
Ya todo es seguir el ancho y largo carril serpenteante que nos deja justo en el punto de inicio de la caminata, la Central Eléctrica El Castañar, punto en donde dejamos aparcado el coche. Eran las 19:00 horas exactamente.
Decir tiene que el tiempo empleado hoy nos ha acompañado generosamente. El sol estaba como disuelto, el viento era fresco pero tirando a agradable e ideal para una larga caminata.
Como apunte de campo, pensamos que esta ruta, en otra atacada, la podríamos acometer y para no utilizar vehículo propio, y además no tener que volver al punto de inicio a recogerlo, utilizando el trasporte público de Granada a Güéjar Sierra tomando la línea regular de autobuses de la empresa Liñán; subir al Castillejo y al llegar a la Carretera de la Sierra, dirigirnos hacia el Purche, para descender por el Camino de los Neveros y terminar, bien bajando por la Fuente de la Bicha a la localidad de Cenes de la Vega y de aquí en autobús a Granada, o bien continuando por el Camino de los Neveros pasando por las Conejeras para terminar en la Bola de Oro, ya dentro del casco urbano de la ciudad.
Es una sugerencia más de tantas posibilidades con las que podemos contar mientras caminamos y hacemos que el andar sea algo realizable y demostrable. De momento, y como recuerdo de esta marcha, aquí dejo con algunas cuantas fotos, como detalle y muestra de nuestros paso, amparándome en la memoria de mi digital. ¡Un saludo y hasta la próxima!
CIRCULAR POR EL CASTILLEJO DE GÜÉJAR SIERRA Y HAZA LLANAS
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DATOS BÁSICOS DE LA RUTA:
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- Acceso: De Granada a Güéjar Sierra – Central Eléctrica el Castañar - (en vehículo)
- Itinerario: Central Eléctrica El Castañar, Barranco-Arroyo del Castillejo, Fuente del Tío Perrancano, El Castillejo (con ruinas y cruz incluidas), Cerro del Chaparral, Carretera de Sierra Nevada (A-395) - nada recomendable-, Centro de Visitantes El Dornajo, Haza Llanas, Cortijo Hoyo Puente, Central Eléctrica El Castañar
- Dificultad: Media.
- Duración: 6 ½ horas en total, con descansos y paradas incluidas. (De 4 a 4:30 h. sin descansos)
- Longitud del recorrido: 16 km. aprox.
- Tipo de recorrido: circular
- Número de participantes: 4
- Agua: Fuente del Ventorrillo (a la entrada de Güéjar Sierra, en donde podemos aprovisionarnos antes de bajar a la Central Eléctrica); Fuente del Tío Perrancano (junto el arroyo del Castillejo) y Fuente de las Víboras.
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- Acceso: De Granada a Güéjar Sierra – Central Eléctrica el Castañar - (en vehículo)
- Itinerario: Central Eléctrica El Castañar, Barranco-Arroyo del Castillejo, Fuente del Tío Perrancano, El Castillejo (con ruinas y cruz incluidas), Cerro del Chaparral, Carretera de Sierra Nevada (A-395) - nada recomendable-, Centro de Visitantes El Dornajo, Haza Llanas, Cortijo Hoyo Puente, Central Eléctrica El Castañar
- Dificultad: Media.
- Duración: 6 ½ horas en total, con descansos y paradas incluidas. (De 4 a 4:30 h. sin descansos)
- Longitud del recorrido: 16 km. aprox.
- Tipo de recorrido: circular
- Número de participantes: 4
- Agua: Fuente del Ventorrillo (a la entrada de Güéjar Sierra, en donde podemos aprovisionarnos antes de bajar a la Central Eléctrica); Fuente del Tío Perrancano (junto el arroyo del Castillejo) y Fuente de las Víboras.